
Es el momento en que Randolph Carter , en su viaje hacia las regiones de sus sueños de infancia, encuentra a Umr-At-Tawil (el de la vida prolongada), justo entre la primera y la última puerta.
Es un encargo de mi amigote
Juan Vásquez para su revista Platino, que en su número 4 es un monográfico del genio de Providence.